![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxN-gdLTcEgbx2uVb88P4OoRrAV4zmtL5ZDreo1lZ4CF6LRDj89ot6-qpPNNCkcr6mdOFbM9LblBtocOumQi1EGw8zk2iM5WJpUWrmH5iQqe70TPEjtUwD6llIA9tWipOod8AJk3dX4reX/s320/1+Las+Meninas.jpg)
El cuadro en su totalidad ve una escena para la cual él es a su vez una escena.
"Quizás haya, en este cuadro de Velázquez, una representación de la representación clásica y la definición del espacio que ella abre. En efecto, intenta representar todos sus elementos, con sus imágenes, las miradas a las que se ofrece, los rostros que hace visibles, los gestos que la hacen nacer. Pero allí, en esta dispersión que aquélla recoge y despliega en conjunto, se señala imperiosamente, por doquier, un vacío esencial: la desaparición necesaria de lo que la fundamenta-de aquel a quien se asemeja y de aquel a cuyos ojos no es sino semejanza. Este sujeto mismo-que es el mismo-ha sido suprimido. Y libre al fin de esta relación que la encadenaba, la representación puede darse como pura representación."
Michel Foucault, Las palabras y las cosas.
Michel Foucault, Las palabras y las cosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario