lunes, 27 de septiembre de 2010

Raku (樂)

(A Tato y a Rubén, por su sensibilidad, y por su invitación)


"La verdadera belleza solamente llega a descubrirla
aquel que mentalmente completa lo incompleto"
Kakuzo Okakura.


Volver a los bordes, después de tanto tiempo.

Palpar con la piel lo irregular de la carne, que se hace barro en un instante.

Acarici
ar desesperadamente un vacío, y meterlo entre los labios, apretado, y beber lo

incontenible, hasta que quede expuesto el dolor y el placer de saberse incandescente.

Volverse fuego, y tierra, y aire, y ser líquida otra vez.




Sentirme contenedoramente c
ontenida,

y quedar atrapada, girando eternamente en un cuenco sublime,

que sólo sabe devolverme al

m
ismo lugar, pero que ya es otro.

Espiar cómo el fuego provoca el brillo,

y el esmalte del tiempo pincelea, una vez más,

aquello que hay, en nosotros, de horrorosamente irrepetible.